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Justificación solamente por la Fe

Escrito por: Rubén Posligua Morales MSc.

Parte 1

¿Quiénes son los hombres a los cuales Dios justifica? ¿Cómo los selecciona? Pablo nos dice que por medio de la fe.

La fe está relacionada con la justificación, porque la fe es la actitud natural para ser justificados.

La mano es el órgano de nuestro cuerpo destinado a recibir, y su naturaleza está perfectamente adaptada para desempeñar ese oficio.

De igual manera la fe y no el amor, ni la alegría, ni la esperanza, es la actitud del alma que nos facilita la manera de apropiarnos la gracia espiritual que Dios ofrece.

Mientras que la imputación acredita a nuestra cuenta la rectitud perfecta de Dios, la justificación nos declara justos de manera forense.

La justificación es otra manifestación de la gracia de Dios.

Sobre la base de su rectitud imputada al creyente, la rectitud de Dios declara al pecador indigno justificado o aceptable para sí mismo.

La palabra griega δικαιόω (dikaioo), un término jurídico helenístico común, significa justificar, reivindicar o declarar recto.

Dios es libre de declarar recto al creyente porque esa persona ahora posee la rectitud de Dios. Ser justificado significa poseer la rectitud perfecta de Dios. No significa como Justificación solamente por la fe.

Mientras que la imputación acredita a nuestra cuenta la rectitud perfecta de Dios, la justificación nos declara justos de manera forense.

La justificación es otra manifestación de la gracia de Dios. Sobre la base de su rectitud imputada al creyente, la rectitud de Dios declara al pecador indigno justificado o aceptable para sí mismo.

La palabra griega δικαιόω (dikaioo), un término jurídico helenístico común, significa justificar, reivindicar o declarar recto. Dios es libre de declarar recto al creyente porque esa persona ahora posee la rectitud de Dios.

Ser justificado significa poseer la rectitud perfecta de Dios. No significa como Justificación solamente por la fe Para demostrar en este tiempo su justicia rectitud, a fin de que Él sea justo y sea el que justifica al que tiene fe en Jesús (o 3:26).

La justificación ha estado en vigor desde la caída de Adán. Abraham es un ejemplo del Antiguo Testamento. Fue justificado solo por la fe.

Gracias por leer esta primera parte de este blog, les espero en su desenlace, Grandes Bendiciones.

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